No se puede olvidar también que la segunda equipación alemana está basada en la camiseta de uno de los equipos más populares de Brasil, el Flamengo. Ninguno de los dos pudo marcar en aquel partido pero ambos defendieron con orgullo y honor la camiseta de Alemania. A ello hay que añadir la acusación tradicional del Gobierno turco de que Berlín no es consecuente con la catalogación europea del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) como organización terrorista. La relación tocó fondo el año pasado, cuando Alemania -como Holanda- impidió que ministros de Erdogan dieran mítines en su territorio, donde viven tres millones de personas de origen turco. Erdogan calificó entonces el veto alemán a sus ministros como “práctica nazi” y los alemanes replicaron enviando a Jordania los aviones de combate que mantenían hasta entonces en Incirlik, Turquía. Los jugadores alemanes bailaron con indios, escribieron y subieron fotos con leyendas y palabras muy típicas del portugués, animaron a Brasil en vídeos, además de contratar a la población local para trabajar en su centro de entrenamiento, dando empleo a más de 250 personas en la ciudad de Santa Cruz de Cabrália. El estudiante de periodismo Renato Senna es uno de estos: «Me identifico muchísimo con la manera que los argentinos viven y sienten el fútbol. En Brasil es muy diferente, sobretodo con la selección. Ellos y los jugadores lo hacen con todo corazón», declaró.
No parece que este mismo equipo les ganara de manera vergonzosa por 7-1 en semifinales. • El gesto de este benemérito indus-trial gana gloria y honor vara el que- lo ha realizado, pero una y otro seproyectan también sobre Barcelona. TELE- GRAMAS Di CONDOLENCIA ; A.t HP por la (arde regresó (le sfl brem I Tinia a la Seo de Urge!, el obirpo de eí-ta • A poco ríe cu llegada, a. Por otro lado, el deterioro de la economía turca y las fuertes presiones sobre su divisa, espoleadas por el propio presidente de Estados Unidos y sus bandazos arancelarios, alertan a Berlín. Esa histórica diana la buscará Klose frente a los Estados Unidos de Jürgen Klinsmann, un referente para el delantero nacido en Opole (Polonia) el 9 de junio de 1978. Miro creció con Klinsmann como ídolo -es el cuarto goleador de la historia de Alemania con 47 tantos en 108 partidos-, fue su técnico en el Mundial de 2006 (Alemania fue tercera y Klose, Bota de Oro) y el entrenador que le modificó algunos movimientos, algo que asegura le ha servido para alargar su carrera y su relación con el gol. Al contrario que Klose, Podolski se sabe de memoria el himno nacional polaco, prefiere la música de su país de origen y habla polaco en casa.
La Francia multicolor que Pogba definió como el país que le gusta se mantiene como el triunfo de la sedimentación racial y cultural. En eso Francia también ha cambiado. Pero las razones van más allá de eso. Con las diferentes versiones de su selección jugó 61 partidos y marcó 22 goles. Klose lleva más de 13 años haciendo goles para la selección alemana, lo que le ha valido esta temporada para convertirse en el máximo artillero de la historia de su país. En el Atleti, haciendo pareja de ataque con Fernando Torres, duplicó la cifra de goles en Liga que logró con el Chelsea, pero fue a todas luces insuficiente y una buena oferta del Fenerbahçe le hizo irse para Turquía. La Mannschaft, que sigue con la marca que históricamente le ha patrocinado desde los años sesenta, ha concretado un acuerdo con una cifra que duplica los números de su contrato precedente, lo que le supone un verdadero éxito en términos de negociación para la DFB. Años zarandeados por la guerra de Siria, la crisis de los refugiados, el oscuro intento de golpe de Estado en Turquía y las subsiguientes purgas de caballo en la administración, la judicatura y el ejército.
Alemania tiene, asimismo, un gran interés en la reconstrucción de Siria, mientras que los puñetazos en la mesa de Donald Trump contra el Nordstream 2 -el proyecto de gasoducto directo de Rusia a Alemania- podrían dar alas a Turquía. No solo ha completado un muro de cientos de kilómetros a lo largo de su frontera con Siria, sino que mantiene generosamente en su territorio a tres millones de sirios, sin aspavientos. Según ciertos especialistas, Adidas es el número uno mundial del mercado futbolístico, disciplina con la que apunta a ganar este año 2.500 millones de dólares. Siendo Adidas alemana cómo si le quiere pagar 1000 millones al año. En cualquier caso, Erdogan tiene muy mala prensa en Alemania y a los germanos se les hace especialmente indigesto ver cómo sus conciudadanos que conservan el pasaporte turco -la mitad- votan masivamente a favor de Erdogan, más incluso que en la propia Turquía. Pero ayer el presidente turco volvía a aterrizar en Berlín -blindada ante las protestas- a invitación de su homólogo, Frank-Walter Steinmeier. Gestora Provmrtal, el presidente accidental fie la misma, dio cuenta de la? Desde que llegaron a Brasil hace un mes, los alemanes conquistaron el país relacionándose casi diariamente con el pueblo.
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